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NOTA NECROLÓGICA
«Olga Fernández Latour de Botas (1935-2025)», por Leonor Acuña
Compartimos el obituario de Leonor Acuña, académica de número de la AAL, especialmente escrito para la Academia Argentina de Letras:
Olga Fernández Latour de Botas ingresó como académica de número a la Academia Argentina de Letras el 28 de julio de 2005 (sesión n.º 1216), para ocupar el sillón n.º 8 Esteban Echeverría hasta el 27 de junio de 2024, cuando pasó a ser académica honoraria de nuestra institución.
Escritora, docente, investigadora, especializada en folklore, historia y filología, fue también académica de la Academia Nacional de la Historia, de la Academia Nacional del Folklore, de la Academia Argentina de Conocimientos Interdisciplinarios (con sede en la Universidad de Palermo), de la Academia Sanmartiniana, de la Academia Belgraniana y de la Browniana. Fue miembro correspondiente de la Academia de Ciencias y Artes de San Isidro, de la Real Academia Española, de la Real Academia de la Historia de España, del Instituto Histórico y Geográphico Brasileiro y del Instituto Histórico y Geográfico del Uruguay, entre otros reconocimientos institucionales.
Creó, junto con su familia, la Fundación Ferlabó que otorga becas y premios y que está dedicada a «proyectos relacionados con la identidad de los pueblos desde perspectivas propias de la Historia, de la Filología, del Folklore y de la Etiología sociocultural».1
Fue docente y ocupó cargos directivos en la Sección Folklore de la Escuela Nacional de Danzas (hoy Departamento de Folklore de la Universidad Nacional de las Artes, UNA), en la Universidad del Salvador y en la Universidad Católica Argentina, entre otras. Publicó más de doscientos trabajos entre libros, artículos, capítulos y otros. Ha participado en incontables reuniones académicas.
El hilo conductor de su vida académica fue, sin dudas, el folklore.2 Se formó y trabajó con quienes dieron origen al folklore como campo científico: Juan Alfonso Carrizo, Bruno Jacovella, Augusto Raúl Cortazar, Carlos Vega, Ismael Moya, Isabel Aretz, Rafael Jijena Sánchez, Félix Coluccio, Bernardo Canal Feijóo, Berta Elena Vidal de Battini y Carlos Villafuerte. Al mismo tiempo, a través de su padre —quien la impulsó a estudiar en la Escuela Nacional de Danzas— tuvo contacto con figuras como Jorge Luis Borges, Macedonio Fernández y Santiago Dabove «que definían al escritor argentino, universal y nacional al mismo tiempo».3 Esta cercanía de alumna dilecta, le permitió conocer, desde el inicio, las diferencias entre escritores y especialistas e incluirlas para ampliar su propia tarea de investigación y docente.
Sus maestros identificaron, describieron y difundieron la cultura material e inmaterial de todo el país, haciendo de ella la identidad argentina. Olga Fernández Latour continuó esa tarea hasta la actualidad. Como integrante de la comisión de argentinismos de la Academia, aportó hasta las últimas reuniones su mirada erudita, histórica y literaria que enriquecía definiciones y contextos.
En su obra Cantares históricos de la tradición argentina4, reúne 249 piezas transcriptas por los maestros en la Encuesta de Folklore de 1921. El libro es de enorme interés, de gran utilidad para los investigadores y de lectura amena. A pesar de la juventud de la autora (tenía veinticinco años), el análisis incluye la comparación con material de otras naciones, la discusión histórica o política del tema, la contextualización y otras consideraciones literarias, filológicas y sociales.
Otro trabajo extraordinario, y también cercano a nuestra academia por su temática, es la Prehistoria de Martín Fierro.5 Se trata de una investigación sobre los antecedentes y orígenes de la obra de Hernández que incluye, además del análisis literario, la discusión de la bibliografía sobre la obra hernandiana, la revisión de los análisis políticos e históricos sobre la obra y también su propio capítulo sobre el origen del folklore como disciplina. Ubica al personaje literario en el contexto antropológico, lo diferencia de otras tradiciones y lo ubica entre los «héroes graves, valientes sin fanfarronería, para quienes matar era una desgracia, una mala jugada del destino» (p. 112).
Con su fallecimiento, la Academia Argentina de Letras ha perdido a un miembro erudito, activo y generoso, con una notable capacidad de trabajo y con el talento de transformar en aprendizaje y, luego, en enseñanza, los testimonios y hallazgos que la investigación folklórica ponía en su camino.
Leonor Acuña
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1 https://ferlabo.com.ar.
2 Dice en su ingreso a la Academia: «Soy consciente de que mi presencia en las corporaciones académicas se debe menos a la necesidad de incluirme a mí que a la de tener un representante, aunque sea modesto, de los estudiosos que fundaron, desarrollaron y sostuvieron en su justo campo y, a partir de él, en relación con la cultura universal, a esta particular disciplina que se llama Folklore». «La décima y nosotros». Disponible en: https://www.letras.edu.ar/wwwisis/index/arti/Boletin2006-285-286_239-266.pdf.
3 Entrevista realizada en el Instituto Nacional de Antropología y Pensamiento Latinoamericano (2022).
4 Fernández Latour, Olga. Cantares históricos de la tradición argentina. Comisión Nacional Ejecutiva del 180º Aniversario de Mayo. Dirección General de Cultura del Ministerio de Educación y Justicia, Instituto Nacional de Investigaciones Folklóricas. Buenos Aires, 1960. Disponible en: http://repositorio.anh.org.ar/jspui/handle/anh/291.
5 Prehistoria de Martín Fierro. Platero. Buenos Aires: 1976. Disponible en: http://repositorio.anh.org.ar/jspui/handle/anh/289.
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